miércoles, 30 de septiembre de 2015

Amor temporal para siempre


Esta es la curiosa inscripción que me encontré hace un par de días pintada en una mesa en un aula. Es una de esas típicas inscripciones que hacen los estudiantes cuando no están atendiendo a la clase. Anhelan a su amor platónico o andan ensimismados en sus fantasías románticas y dejan constancia de sus sentimientos de la forma más artística que consideran oportuna: una inscripción con tipex en la mesa de su clase.
El caso es que esta inscripción es especial porque el sujeto que resulta amado no es una chica ni un chico, ni siquiera es una persona, animal o ciudad... ¡se trata de un año! Supongo que el 2013 supuso un periodo extraordinario para Jorge, que le permitió vivir experiencias maravillosas que jamás olvidará y que ese año es una almazuela de 365 días que guardará siempre en su corazón. Supongo que sí, que existe el amor temporal, que uno puede enamorarse de un año de su vida (enamorarse de un año que no has vivido sí que sería un amor temporal platónico) y supongo que puedes dedicarle una inscripción de lo más curiosa. Bravo Jorge, os deseo todo lo mejor a ti y a tu 2013, que seáis felices para siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡La interacción mola! Dime qué te ha parecido esta entrada.